Juan y el caldero

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Juan y el caldero

Juan y el caldero

En la bella isla de Puerto Rico, vivía Juan con su mamá. Juan era un niño de buen corazón, pero siempre andaba en problemas por no seguir instrucciones.

Un día su mamá lo llamó y le dijo:

—Juan, necesito que vayas donde tu madrina y le pidas prestado el caldero. Estoy cocinando un asopao de pollo y no me cabe en la olla. ¡Apúrate que lo necesito con urgencia!

—Claro que sí, mamá —respondió Juan.

El asopao de pollo era su comida favorita, así que salió corriendo colina arriba hacia la casa de su madrina.

Al llegar, su madrina lo saludó y le entregó el caldero.

—Juan, ten mucho cuidado con mi caldero, recuerda que es de cerámica y puede romperse—le dijo.

—No te preocupes madrina —respondió Juan, mirando la enorme olla de tres patas.

Entonces, emprendió su camino colina abajo hasta que el sudor empezó a recorrerle por la cara y sus brazos comenzaron a sentirse muy, pero muy cansados ante el peso del caldero.

Su casa no quedaba muy lejos, Juan puso el caldero en la tierra y se detuvo para pensar:

“Los perros tienen cuatro patas y caminan. Los gatos tienen cuatro patas y caminan. Las gallinas tienen dos patas y caminan, ¿cómo es posible que este caldero de tres patas no camine?”

Juan miró el caldero y con toda seriedad le dio la orden:

—Camina caldero de tres patas, mi madre te espera para hacer asopao de pollo.

¡Pero el caldero no se movió ni un poquito! Muy enojado, Juan le dio una patada y lo mandó rodando por la colina, con tan mala fortuna que el caldero se estrelló contra una roca y se quebró en mil pedacitos. Nadie supo si Juan cenó asopao de pollo.

Lo que sí se sabe es que después de ese día, la madrina dejó de confiar en Juan… y su mamá nunca volvió a pedirle favores.

Edad recomendable para contarlo:

Este cuento es apropiado para niños y niñas de 5 años en adelante, ya que se trata de una historia sencilla con una moraleja clara y fácil de entender. Sin embargo, es importante que los padres o cuidadores adapten el lenguaje y la forma de contar la historia a la edad y nivel de comprensión del niño o niña.

Moraleja:

La moraleja de este cuento es que es importante seguir las instrucciones y ser responsables con las tareas que nos encargan, especialmente cuando se trata de algo que pertenece a otra persona y que debemos cuidar. Además, debemos ser conscientes de que nuestras acciones tienen consecuencias y que podemos perder la confianza de los demás si no actuamos de manera responsable.

En que ambiente se recomienda contarla:

Esta historia puede ser contada en un ambiente educativo, como en una escuela o en una familia donde se esté tratando el tema de la importancia de seguir instrucciones y la responsabilidad en el cuidado de las cosas de otros. También puede ser contada en un ambiente de entretenimiento, como en una reunión familiar o en una actividad recreativa.

Preguntas Frecuentes:

  1. ¿Cuál es la moraleja de este cuento? La moraleja de este cuento es la importancia de seguir instrucciones y no actuar impulsivamente. También enseña sobre la importancia de ser responsable con las pertenencias de los demás y ser cuidadosos al manejarlas.
  2. ¿Qué lección aprendió Juan al final del cuento? Juan aprendió que no debe desobedecer las instrucciones y que debe ser más cuidadoso al manejar las pertenencias de los demás.
  3. ¿Por qué la madrina dejó de confiar en Juan después del incidente con el caldero? La madrina dejó de confiar en Juan porque él no fue cuidadoso con el caldero que le había prestado, lo rompió y no se hizo responsable de su error.
  4. ¿Por qué la mamá de Juan nunca volvió a pedirle favores después del incidente? La mamá de Juan nunca volvió a pedirle favores porque Juan no había seguido sus instrucciones y había roto el caldero de su madrina. Probablemente perdió la confianza en Juan para encargarle tareas importantes.
  5. ¿Crees que Juan aprendió la lección después del incidente con el caldero? Sí, parece que Juan aprendió la lección después del incidente con el caldero, ya que se dio cuenta de que debía seguir instrucciones y ser más cuidadoso en el futuro.

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