Índice del contenido:
Objetivo
✔Utilizo la lógica para resolver problemas.
Juego de rompecabezas
Escoge tu anfibio favorito y diviértete armando este rompecabezas deslizante. El nivel de dificultad varía según el número de piezas: 9, 16 o 25.
DEFINICIÓN DE ANFIBIOS
Del latín amphibĭus, el término anfibio permite nombrar al animal que puede vivir tanto en tierra como sumergido en el agua. Los sapos y las ranas, por ejemplo, son animales anfibios ya que, de jóvenes, tienen branquias y viven en el agua; sin embargo, de adultos, desarrollan pulmones y pasan a vivir en la tierra.
Los anfibios pertenecen a la clase de vertebrados anamniotas, tetrápodos y ectotérmicos, con respiración branquial en el periodo larvario y pulmonar en la adultez. Esta metamorfosis que experimentan con el tiempo permitió que los anfibios sean los primeros vertebrados que lograron adaptarse a una vida semiterrestre.
Además del mencionado desarrollo de la respiración pulmonar, los cambios incluyen la aparición de extremidades y de órganos sensoriales que funcionan en ambos medios.
En la actualidad, los científicos estiman que existen unas 6.347 especies de anfibios que se reparten en 60 familias. Pueden mencionarse órdenes como los anuros (que carecen de cola, tienen miembros desiguales y una columna vertebral adaptada al salto), los caudados (con miembros iguales y cola) y los gimnofiones (también conocidos como cecilias o ápodos, son animales excavadores que no tienen patas).
A la hora de determinar una clasificación de los anfibios nos encontramos con una amplia tipología de ellos. No obstante, entre los grupos más destacados se encuentran los llamados ápodos que son aquellos que se definen por el hecho de que no tienen patas, lo que supone que su manera de desplazarse y moverse sea arrastrando su cuerpo. Un claro ejemplo de esta clase de animal sería, por ejemplo, la cecilia que es una especie de lombriz que vive en zonas subterráneas y sin luz.
Otro de los grupos más importantes dentro de los anfibios es el que se da en llamar urodelos. Dentro del mismo se encuentran aquellos animales que se caracterizan porque tienen una cola visible, no están muy desarrollados sus ojos y cuentan con un tronco y unas extremidades de forma muy alargada.
Entre los principales ejemplos que podemos poner de urodelos nos encontraríamos con las salamandras. Inofensivas para el hombre son estas que se identifican porque habitan en zonas húmedas, disponen de cola y cuatro patas, existen ocho familias diferentes de ellas y cuentan con un cuerpo donde toman protagonismo los colores amarillos y naranja.
Características principales de los anfibios.
Descripción
Los anfibios son animales vertebrados anamniotas poiquilotermos, caracterizados en la mayoría de los casos por sufrir metamorfosis, es decir, importantes cambios en su organismo; principalmente desarrollan dos tipos de fases, una larvaria en la que su respiración es branquial y otra pulmonar al llegar a la edad adulta.
Entre sus características principales destacan su piel fina y húmeda, lisa o rugosa en función de la especie, carece de pelos o escamas y está provista de glándulas con una multitud de funciones esenciales para proteger al animal, por ejemplo, controla su temperatura corporal, colabora en su respiración, pueden desprenden sustancias tóxicas para persuadir a su enemigo e incluso les ayuda a permanecer desapercibidos en su hábitat natural.
Normalmente su color se adapta al medio, aunque existen especies de anfibios con pigmentación en la piel muy pronunciada (aposematismo) con la finalidad de mantener alejados a sus depredadores, pues como mantuvimos con anterioridad les advierte de sustancias nocivas.
Los ojos son grandes y saltones, permitiendo al anfibio cazar con facilidad sus presas, algunos ejemplares poseen una pupila vertical, que posibilita la visión nocturna, aunque existen también ejemplares con pupila horizontal e incluso redonda, en aquellos anfibios con costumbres diurnas. Los dedos de sus pies se adaptan a los hábitos del anfibio, pueden ser palmeados, para capacitar un mejor movimiento en el medio acuático, o con almohadillas, las cuales facilitan al anfibio adherirse y trepar entre la vegetación, tanto las manos como los pies son generalmente pentadáctilos, a excepción de las cecilias o ápodos que carecen de extremidades.
Otra característica de los anfibios es lo concerniente al aparato circulatorio, poseen un corazón tricameral; dos aurículas y un ventrículo. La circulación es cerrada, doble e incompleta.
Al tratarse de animales vertebrados presentan columna vertebral, la cual se ajusta con el cráneo gracias a la presencia de los cóndilos. Son animales tetrápodos, es decir, poseen extremidades y sus correspondientes articulaciones, aunque ausente en las cecilias.
En lo referido al sistema digestivo es otra característica de los anfibios que no debe pasar desapercibida, los dientes son escasos y son de gran ayuda para sujetar a las presas, la lengua está especializada para la captura de alimentos; el estómago tiene forma tubular, presentan intestino grueso corto, dos riñones y vejiga urinaria.
No obstante, otros seres vivos enmarcados dentro de este grupo serían los tritones, que tienen vientre de color amarillo y manchas circulares negras y que son conocidos por el hecho de que a la hora de reproducirse lo hacen a partir de una singular danza del macho.
Los proteos y las sirenas son otros anfibios que también se engloban dentro del citado grupo de los urodelos.
La noción de anfibio (que significa “en ambos medios” o “ambas vidas”) también permite hacer referencia a las plantas que pueden crecer en el agua o fuera de ella; a los vehículos que pueden funcionar en el agua, en la tierra o en el aire y a las maniobras militares que se ejecutan de manera conjunta entre las fuerzas de tierra, mar y aire.